"Huele a Feria" y "Huele" a polémica, no porque el afiche de la versión 55 de la Feria Exposición Agropecuaria de Tuluá lo haya hecho un creativo tulueño y no "Caremonja", sino por los criterios que desde la Junta de Exposiciones se están tomando para orientar el máximo evento de los tulueños.
"Es que el afiche cumplió su objetivo, generó polémica", no podemos ser tan miopes para quedarnos con esos comentarios superficiales cuando la trascendencia de este hecho va mucho más allá: es la imagen de la Feria y la imagen de Tuluá!
"Es que no podemos ocultar nuestra realidad y eso somos", también se ha dicho, pero también somos creativos, recursivos, capaces, diversos y poseemos una gran diversidad y riqueza de exposiciones y un imponente Coliseo que son nuestro único icono de proyección y rceonocimiento nacional.
Preocupa las ligerezas con que se toman las decisiones en la Junta de Exposiciones de la Feria de Tuluá, que en su versión 55 ha estado, lamentablemente, salpicada de renuncias y confrontaciones en secreto que pretenden ocultar manejos administrativos que puedan poner en riesgo la estabilidad de nuestro certamen ferial.
Si bien es cierto las 55 ediciones de la Feria de Tuluá le fa una mayoría de edad para andar solita y avanzar con pasos agigantados, también es oportuna evaluar lo que está pasando y revisar los cuestionamientos a las inversiones que se adelantan dentro del Coliseo y a los resultados de recientes eventos previos a la Feria.
"Huele a Feria", el máximo evento de los tulueños, pero también huele a molestias, inconformidades, incumplimientos en pagos, dudosos contratos, eliminación de actividades sin ninguna justificación y consenso, a intereses más privados que públicos, más individuales que colectivos, decisiones arbitrarias y desconocimientos de procesos que se han venido cumpliendo en beneficio de la Feria y de Tuluá.
"Huele a Feria" y esperamos con los brazos y el Corazón abierto, que sea un olor envolvente de alegría, fiesta, rumba, encuentro de amigos y de la familia, diversidad y amistad, de empleo para muchos tulueños en condicíones justas y reales acorde a nuestra realidad social, y al carácter público que debe ser la Feria de Tuluá!
Rubén Darío Benítez S.
Tierra y Justicia
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